Las avispas tienen una temporada en el año y es durante los meses más cálidos, si te encuentras cerca de alguna fuente de su interés – comida, agua o bebidas azucaradas – hay más probabilidades que te encuentres con ellas.
No importa la raza, edad o tamaño que tenga tu perro, todos son propensos a sufrir la picadura de una avispa, pero si existen algunos características que los hace más expuestos a que suceda.
Como a cualquier insecto los perros se dedican a cazarlos con la boca, por lo que es muy común que las picaduras de avispas ocurran dentro o alrededor de la cavidad bucal causando una gran molestia y dolor.
Entre los principales síntomas puedes encontrar:
- Inflamación en el lugar de la picadura, que es la señal más frecuente en estos casos.
- Dolor en la zona.
- Enrojecimiento.
- Prurito.
- Hinchazón de la cara en los casos en los que la picadura haya sido en la cabeza.
- Problemas respiratorios si la picadura ha ocurrido dentro de la boca, debido a la hinchazón que se origina.
- Shock anafiláctico
Mientras acudes al veterinario puedes hacer algunas cosas para ir aliviando su dolor, lava la zona con agua y jabón neutro, luego aplica frío en la zona usando hielo o alguna bolsa de productos congelados, no lo automediques hasta que lo atienda al médico
Algunos perros son alérgicos a la picadura de avispas o abejas, por lo que puede sufrir de un shock anafiláctico, de suceder esto tienes que llevar a tu perro lo más pronto a emergencia para ser atendido ya que puede ser mortal
Así que si notas que tu perro ha sido picado por una avispa recurre con el veterinario y vean la gravedad del asunto y si es necesario utilizar fármacos con tu mascota para evitar problemas mayores.