Los gatos pueden ser agresivos como un instinto de acecho y caza debido a su antepasado, aunque actualmente estén domesticados, es muy normal que al ver algo moverse su instinto sea atacarlo, sea tu mano, pie, incluso, hasta niños pequeños.
La mayoría de los casos las agresiones son causadas por el miedo o la curiosidad, en el caso de los gatos mayores esto puede variar y su agresividad se puede dar a una patología que le causa mucho dolor.
Son animales muy territoriales, por lo que siempre van a proteger su territorio al sentir una amenaza o intruso – como puede ser un niño pequeño u otro animal – esto puede ser corregido con adiestramiento desde temprana edad.
Para saber si un gato es agresivo presentará algunas señales de comportamiento como sigilo, silencio, postura de alerta, posturas de caza y lanzarse o saltar sobre las “presas” que se mueven repentinamente después de estar inmóviles.
Antes de comenzar con un adiestramiento para que deje de ser agresivo es recomendable que lo lleves al veterinario para asegurarte que no sea debido a alguna enfermedad o lesión que padezca, en caso que sea así será recetado para curarlo lo más pronto posible y deje de ser agresivo
El adiestramiento es algo que requiere de tiempo, paciencia y constancia, su educación es completamente distinta a la de los perros y no responden de la misma manera a la terapia de aversión.
Detén un ataque en curso a través de una pistola de agua, un pulverizador de citronela o el sonido del silbido del aire de una lata de aerosol, coloca un arnés y una correa en el gato para darte un mejor control y la capacidad de interrumpir el comportamiento indeseable, el simple hecho de pisar el extremo de la correa puede detener a una mascota en su camino.
Crea una rutina regular que incluya un tiempo específico para jugar, de modo que el tiempo de juego se convierta en parte de las expectativas diarias de tu gato, esterilizar o castrar a los gatos antes de su primer cumpleaños puede reducir considerablemente la agresividad en los gatos
Busca la ayuda de un adiestrador de mascota para que puedan educar a tu mascota y no siga siendo agresivo, una conducta que hay que corregir lo más pronto y rápido posible para evitar problemas.